martes, 17 de enero de 2012

Un payaso que despertó dolor

Los mexicanos se ríen de la muerte, sí, pero ya no de todas. Algo ha cambiado en este país que ya no se resigna ante toda tragedia mediante carcajadas. Este fin de semana, el emblemático y macabro sentido del humor de México experimentó un viraje. Hasta ahora había sido normal festejar, con mayor o menor apertura, bromas sobre los muertos en el terremoto de 1985 (tan devastador que destruyó barrios tradicionales de la capital mexicana y dejó un número nunca aclarado de muertos: unos calculan 10,000 otros multiplican esa cifra); chistes también sobre los fallecidos en la explosión de una planta de PEMEX en San Juan Ixhuatepec (barrio conurbado a la capital mexicana donde en 1984 volaron por los aires las casas de varias manzanas, con un saldo de centenares de muertos). Era casi natural: tras la eterna desventura, la chanza, la risa del que no tiene otro recurso para tratar de paliar el revés del destino que a veces se ponía disfraz de naturaleza y en otras tantas de negligente autoridad.

Todo lo anterior, con disculpas de los sociólogos, era válido hasta el domingo, cuando en México comenzó a circular en las redes sociales, principalmente en twitter, un fragmento de un vídeo de un show de un conocido payaso llamado Platanito. La risa se congeló y dio paso a una de las indignaciones colectivas más hondas y contundentes: no es aceptable bromear sobre la tragedia que le costó la vida a 49 niños en un incendio ocurrido el 5 de junio de 2009 en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora, una estancia de cuidado infantil concesionada por el gobierno a unos particulares, entre los que se encuentra una prima de la esposa del presidente Felipe Calderón. Como tampoco es válido llamar a lo que ocurrió ahí accidente, cuando múltiples irregularidades han sido denunciadas y escasa, sino nula, ha sido la justicia que han tenido los familiares de las víctimas. Hay que mencionar que además otros 70 infantes, de menos de 6 años cuando ocurrió la tragedia, quedaron con lesiones de por vida --algunas de tratamiento recurrente-- después de ese incendio.

Según se puede apreciar en el video que ha circulado, en apenas 40 segundos Platanito, que sin maquillaje y peluca responde al nombre de Sergio Alejandro Verduzco, se refiere en tres ocasiones a la muerte de los infantes. También hay que decir que el público que estaba presente en el show reacciona a lo dicho por Platanito con risas: ni un abucheo ni una protesta se escucha.

Pero si en el video no se aprecia muestra de rechazo alguna, en las redes sociales este lunes no cabía una más. No sólo fue trendig topic y noticia destacada en los principales portales de los medios periodísticos, sino que hubo peticiones de que se cancelara el espacio televisivo que ocupa este payaso que hace "humor para adultos".

La guardería ABC ha significado la peor tragedia en los 68 años de historia del Instituto Mexicano del Seguro Social (organismo del Estado que lo mismo brinda servicios médicos y hospitalarios que administra las pensiones de los asalariados). Pero sobre todo, se ha constituido en un símbolo de la impunidad y un pésimo manejo por parte del gobierno en sus tres niveles: federal, estatal y municipal. De la tragedia surgió el Movimiento 5 de junio, uno de los que más ha logrado conmocionar a la sociedad. No sólo porque era incuestionable su demanda de justicia, sino porque además los padres y las madres de la guardería ABC han empleado su energía para mover esa cordillera burocrática que son el gobierno federal y el Congreso de la Unión y lograr en tiempo récord modificaciones legales de prevención para que nunca más haya una tragedia como la que se llevó a sus hijos.

El debate ha incluido llamados para evitar un linchamiento y sacar del episodio aprendizajes. Muchas horas después de iniciada la polémica, digamos que largas 24 horas después de que el tema sacudía las redes, Platanito por fin se disculpaba: me faltó sensibilidad, ha dicho. Y que nadie diga que antes, sin redes sociales, esto hubiera sido distinto. Es precisamente al revés: las redes sociales han comunicado sin tregua el cambio de actitud.

México, que se ríe de todo, ahora sabe que ese "todo" no incluye el dolor de los padres, las madres, los hermanos, los amigos y de todo el que aún no cree que al mediodía de un  viernes de junio en Hermosillo, Sonora, cuando dormían, a unos chiquitos les cayó encima el fuego por el cual hoy sólo se ha procesado a pequeños funcionarios, diminutos frente a una tragedia que no admite broma alguna.

EL PAÍS.com - Por: Salvador Camarena | 17 de enero de 2012

1 comentario:

  1. Ni con una disculpa podra sanar a las madres de los bebés =/ Como lo siento por él, pues nadie lo vera igual. Ese chiste... Ya no era chiste...

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